Cuando escuche acerca sobre la Bienal de Arte Urbano, creí que no tenía una relación directa con lo que es la “Economía Creativa”… GRAVE ERROR, porque se relaciona con ¡TODO!

Recordemos y/o aprendamos un poco de qué es la economía creativa. Podrán relacionar términos de: producción, intercambio y consumo de bienes y/o servicios, que serán distribuidos de nuevas o distintas maneras. Si estos términos pasaron por sus mentes, no están lejos, pero que la imaginación no los lleve a creer que es la casera de la esquina que intentará poner sus productos en facebook.

En el libro Economía Creativa como estrategia de desarrollo: una visión de los países en desarrollo, Ana Carla Fonseca Reis nos da a entender que la «Economía creativa» es una estrategia de desarrollo orientado a la catalización y provisión de valores intangibles, que tienen a la Creatividad como un componente esencial, por ello abarcan –fuera de abarcar las industrias culturales- las artes visuales, artes escénicas, videojuegos, artesanías, diseño gráfico, diseño de moda, música, publicidad, entre otros.

Observemos y resaltemos que es hora de ver a las artes como una industria que puede sostener a los artistas, así como también contribuir a la creación de riqueza en la economía de países enteros.

Ahora tocando el tema del arte urbano, podemos dar un claro ejemplo de JR, este artista francés utiliza su cámara para mostrar rostros  en enormes lienzos de fotografías en blanco y negro que cubren edificios en suburbios de Nairobi en Kenia, barrios marginales de París, Medio Oriente, África y favelas en Brasil. Después de ser despegados sus afiches han alcanzado hasta 50000 euros en subasta. Fuera de vender los lienzos por el precio mencionado, hay que tomar en cuenta el movimiento turístico que se genera en los espacios donde estampa arte callejero, fuera de dar voz a un contexto olvidado.

 

Pero es un caso de pocos -podrían estar pensando-, el artista fue innovador lo que implica que fue audaz, lanzado y rompió con esquemas que seguro se interpusieron. Si no ha llenado sus expectativas, otro ejemplo que se pueda dar – y uno más «empresarial»- es el uso de la publicidad BTL; esta técnica de mercadeo extraña, consistente en el empleo de formas de comunicación no masivas, pero más directas, permitiendo una relación inmediata con el consumidor y lo más atractivo, para quien lo aplica bien, es que suele tener bajos costos.

Entonces para nuestras calles: si una favela en Brasil se ha convertido en un sitio turístico a  nivel mundial, por ende el “Paseo de las Artes” deberá ser un sector atractivo -mínimamente- para los visitantes internos.  Si las formas no convencionales comunicación tienen mayor efectividad e impacto en los receptores ¿Por qué no aplicarlas?  ¿Por qué no usarlas espacio cotidianos? De modo que no tengamo que pensar: ¡que fastidio de anuncio publicitario!

Sea un punto de reflexión, para un artista o un empresario, la siguiente pregunta:

¡¿Qué está pasando con el arte en nuestras calles?!

Quizás piensen que un país no tiene que ver nada con otro, es cierto, si bien cada contexto tiene lo suyo, nada hace que cada situación tenga abandono y descuido en las calles; o que una idea es absurda y por tanto difícil de plasmarla en algún punto de la ciudad.

Ha llegado la hora de resignificar el valor de las cosas, de atrevernos, de reinventarnos, de ser creativos. Seamos conscientes que toda esta corriente económica es potencial de crear ganancias y puestos de trabajo. Ha llegado la hora de implementar una economía creativa, y que mejor empezando desde un barrio olvidado.